Es digno de estudio observar con qué maestría, con qué buen hacer, con que estilazo, lleva la alcaldía nuestro jefe máximo desde alhucemas, desde tailandia, desde el caribe, desde cualquier sitio menos desde el despacho del ayuntamiento, que es propiedad, también indiscutible, de la amiga celedonia.
No crean que es tan fácil compaginar una semana de vacaciones al mes con la alcaldía. Sólo un espíritu superior puede hacer alardes de ese estilo. Pero el señor yanguas tiene su corazoncito, su morriña, su melancolía. También él nos añora cuando se va de viaje a menorca, a italia, a su chalé de marruecos. Nos echa de menos. Sufre. Y es por eso que ha decidido colocar una cámara en la playa puerta del mar. Públicamente ha dicho que es para que los alemanes, con su jarrita de cerveza en una mano y la salchicha en la otra (me refiero a eso que llaman bradwhurts o algo así), puedan ver a las almuñequeras en bikini tomando el sol tan ricamente mientras ellos oyen las gotas de lluvia en el tejado de su triste y umbrío pisito.
Qué iba a decir el hombre. Así contenta a mi amigo lamelas que está últimamente apesadumbrado con esto de las obras del parking de san cristóbal, la tierra que echan a las playas y cositas así. Qué iba a decir el hombre. Pues que es para fomentar el turismo. Y así, ya se puede justificar que nos gastemos 27.000 euros en instalación y mantenimiento, y que nos gastemos 45.000€ en la promoción.
Pero el tema es otro, es tan simple y humano como que nuestro alcalde necesita vernos cada día. Y así, cuando esté tumbado en una piscina de las bahamas, sasca su portátil, aparta el daikiri de la mesa para no manchar el teclado, se conecta a internet y puede vernos.
He observado que la cámara no gira a la izquierda, así que no se puede ver desde alemania la magnífica pasarela que le ha montado yanguas al señor trinitario. Eso es una pasarela bien hecha y lo demás son tonterías. Dos hileras azulitas bien ordenadas desde el club náutico hasta el agua, adornadas con sus banderitas y venga a entrar y salir barcos. Quizá estemos hablando de una experiencia piloto para cuando tengamos la marina seca. Yo supongo que han empezado por ahí, pero que ahora a todos los negocios le van a poner una pasarela de esas dobles y directas hasta el agua.
Me dice un amigo que menos mal que derribaron el chiringuito de la ponderosa porque si estuviera ahí estaría como estorbando. Y hasta puede ser que los materiales del chiringuito se hayan reciclado y ahora estén sirviendo para construir magníficas viviendas en la india. Para que luego digan que no hay solidaridad. Viva el internacionalismo proletario, que diría el camarada nicolás.
Por cierto, esto no se me puede olvidar. Ya he visto gente de lo más variada apadrinando bichos de lo más curioso. Y creo que yanguas y fermin te tienen aquí otro reto, otra oportunidad. El pueblo les está pidiendo un esfuerzo. Lo del viaje a menorca no pudo ser, pero hay que seguir intentándolo. Quizá podrían estudiar un convenio de colaboración entre el camping, la casa morgan y el alcalde. Se trataría de que fermín te tuviese un recinto con su placa y su monolito allá en lo alto, en la peña escrita, y unas jaulitas coquetas en las que colocaría unos cuantos camaleones y alguna ardilla de esas que bajan por los pinos de paseo. La casa morgan podría llevar los desperdicios del restaurante para dar de comer a los animalitos y una gran foto de yanguas, fermín te y el jefe de casa morgan podría dar la bienvenida a los turistas. Con las influencias de fermín te, por un lado, y el buen hacer de yanguas por otro, podrían declarar peña escrita un parque reserva de la humanidad, y a partir de aquí, ya sería la leche. Se me ponen los pelos de punta nada más que de pensarlo.
Pero me gustaría volver a lo de la cámara porque tengo un interés personal en el tema. Yo siempre suelo bañarme un poquito más al oeste, tirando pa málaga, pasados los peñones, y ahora me estoy planteando irme a la playa de puerta del mar para poder saludar a nuestro alcalde. Aunque quizá llame a mi amigo fermín te y le diga que presente una moción para que pongan otra cámara de esas en la pisá la vaca y así es más completa la promoción turística. En esa cámara saldríamos mi señora y yo comiendo tortilla en una mesa de playa, como algo típico, que no todo va a ser turismo de calidad, los chavales tirándose de cabeza desde las piedras para que los miren las jovencitas, las barquillas sacando al atardecer cuatro kilos de morralla… el pueblo llano. Total, por 72.000 euros más al año. Estamos hablando de calderilla. Es bastante menos de lo que nos cuesta un alcalde, por ejemplo. Salud
7 de junio de 2008
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