Mi amiga trini, a la que aprecio de verdad, está sintiendo, como todos, el paso de los años, y es ese inexorable discurrir el que la ha hecho declarar esta semana que los del pepé no habían acordado nada con los otros partidos acerca del último pleno. No vean mala fé en esta declaración porque es sólo un problema de memoria. De todas maneras, con lo que fermín té la quiere a ella, yo creo que se ha pasado en los calificativos que le ha mandado en el último panfletillo pepero.
La memoria juega malas pasadas a todo el mundo en general, pero últimamente se está cebando con los del pepé. Yo creo que eso es por renegar de la memoria histórica. Quizá las otras memorias se han solidarizado con la histórica y han dado un plante a los peperos, también llamados al parecer populares.
Hoy he leído que el alcalde de un pueblecito llamado vitigudino no recuerda quién ha dado las órdenes para restaurar un monolito de tres metros dedicado a los caídos en la gloriosa cruzada. Los obreros han repintado los nombres de primo de rivera y otros héroes, y si el alcalde dice que él no ha dado la orden, no me extrañaría que hubiera sido cosa de ellos mismos, como ya sabemos que ocurrió en nuestro pueblo con la cerradura de la tele.
La falta de memoria está haciendo estragos hasta tal punto que en los últimos meses no dejo de escuchar a los peperos hablando de las libertades, de los derechos civiles y del gobierno represor. Están que no paran con lo de sitel, el internet o la libertad religiosa. Eso sí es bonito. Ahora también se han acordado de pedir la libertad religiosa.
Su amnesia, y la de los amigos párrocos, les impide recordar qué decían sus antecesores hace treinta, cuarenta, cincuenta, sesenta, setenta, doscientos, cuatrocientos o mil quinientos años antes de rajoy y rouco. Con lo fácil que sería releer esas cartillas tan chulas que leíamos en la escuela, los niños en la nuestra y las niñas en la suya. O esos catecismos tan interesantes que leían nuestros padres en la escuela, mi padre en la de machotes y mi mami en la de niñas, con su bonito costurero y el bordador tan majo. Han olvidado incluso cuando le daban comunión a pinochet y no lo excomulgaron porque no había votado la infame ley del aborto.
Pero el problema se está extendiendo. No hay otra explicación para los lapsus de mister obama. El hombre está reforzando su política de defensa, así se le llama, en afganistán, y no sería de extrañar que dentro de poco mandara otro puñado de soldados a defenderse en pakistán. ¿Habrá olvidado el buen hombre que hace poco le dieron el nóbel de la paz?
El que también parece tener problemas de memoria es el gran yanguas, que ya apenas recuerda por qué dijo eso de la zorra, o por qué meses después le dijo al tierno prados eso de tóqueme usted los pirindolos. Ahora le ha comprado la cele una maceta de nomeolvides. Ya veremos los efectos. Igual recuerda de pronto en qué hucha metió el dinero que la junta le envió para la ayuda a domicilio, paga, y se acaba la huelga. Pero si no le viene la memoria, eso sí que es un problema. No para yanguas, por supuesto, que ni es mileurista ni viejecillo de atender todavía. Así que no creo que esta huelga vaya a evitar un viajecito de relax al chalé de marruecos. Tengan ustedes en cuenta que ahora, entre el alcalde y la señora cobran dos sueldecitos y dos extras. Echando por debajo, doce mil eurillos. Joder, si lo pones en pesetas, salen dos kilos. ¿Tanto se gana en esto?
Salud
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