El guord estar

Los tíos estos de la diputación son la leche. Ahora nos dicen que los datos informáticos que ellos habían enviado estaban perfectos, pero que el técnico que ha contratado la empresa no tiene ni idea. Yo creo que no deberían haber sido tan crueles porque en este mundo de la tecnología hay algunos que siempre vamos un poquillo retrasados pero eso no es motivo para comernos la moral.

Es verdad que el muchacho éste que ha fichado recam se presentó allí en granada con unos disquetes de cinco pulgadas para que le grabaran la base de datos y cuando vio que se reían sacó unos de tres y media que llevaba en la cazadora y les dijo muy serio: ¿y ahora qué, listillos?

Yo me acuerdo cuando empecé con esto del procesador de palabras. Había uno fantástico que se llamaba first publisher. Con ese pedazo programa se hacían unas octavillas fabulosas. Estaba también el guord estar, que sucumbió ante la fuerza arrolladora del guord perfect cinco uno, y luego llegó ya el triunfo del guord sin más, ni estar ni perfect ni rollos macabeos: el guord y se acabó. Ahí empezó el triunfo total del señor guillermo puertas al que algunos llaman bill geit.

Pasó lo mismo con los discos, con los sistemas operativos y con las hojas de cálculo. El joven este que ha fichado recam es un nostálgico y se había empeñado en que los de la diputación le dieran el programa bueno, el de toda la vida, el debase tres.

Como asesor, y para que no le engañaran, el joven se fue a granada acompañado de un experto llamado antonio díaz, y entre los dos vinieron para abajo comentando lo chungo que es esto de la tecnología. No se habían enterado de mucho porque estos de granada, por incultura o por mala leche, se habían negado a darle los datos en debase y además les habían dicho que la actualización no se podía meter en aquellos discos tan bonitos del cinco y cuarto sino que ya la tenían por vía adeseele.

Cuando le fueron con el cuento a yanguas, éste decidió cortar por lo sano y le dijo al personal lo que se dice en estos casos, que no hay dinero por culpa del pesoe, de la cegeté y de un juez que no tiene ni idea de lo que es la justicia.

Ahora parece que ya sí hay dinero, y que el joven este de recam ha tirado los disquetes de tres y media, los de cinco y cuarto y el manual amarillento del debase tres. Y ahora ya sólo queda convencer al señor juez de que tiene que levantar la suspensión cautelar de la recaudación privada. El argumento es simple y contundente: señor juez, mire usted, nos pasamos la suspensión esa por el arco del triunfo, estamos recaudando lo que nos da la gana y como nos da la gana, así que usted verá si tiene sentido mantener una suspensión que no suspende.

Yo creo que el problema gordo viene ahora, cuando haya que volver a imprimir cincuenta pancartas pidiendo el municipio turístico, porque en vez de poner señor chaves, van a tener que poner señor griñán. Y, además, como este nuevo no es tan cabezón, habrá que buscar los chistes por otro lado. ¿chaves o no chaves?