La familia es lo más mejor, se lo dijo chaves ayer al quintero. Hace un par de semanas, los obispos dijeron lo mismo. La familia cristiana, por supuesto, la de toda la vida, un hombre, una mujer y un chorro de chiquillos. El otro día salió en la tele ese hombre al que todos llaman papa aunque nadie sepa el nombre de sus críos. Y dijo lo mismo: qué bonita es la familia, qué bonito es el matrimonio de un tío y una tía. Tan emocionado se le veía hablando del matrimonio que por un momento pensé que nos iba a anunciar su boda, como sarkosí. Pero no, el hombre éste, el benedicto, no se casa. Ya es mayor, desde luego, pero, en fin, llamando a juanymedio eso se puede arreglar. El tema es querer. Y éste no quiere. No quiere casarse.
Quedamos en que la familia es lo más guay. Y lo más chachi es defender a la familia. Pero para eso, ni rouco varela ni el benedicto. El más enrollao en eso es yanguas. Sí, sí, yanguas. Es verdad que se había divorciado, o no, como dice mi niño, o no, pero también se divorció álvarez cascos y es del pepé. A la familia se la protege de verdad haciendo como yanguas. Tenía a su hijo buscando curro y le puso un periódico para él. Un periódico y una tele. Eso es un padre.
Ahora estaba su señora en paro. Se acabó el curro aquel de turismo que le habían dado los del pesoe, esos feroces enemigos de yanguas. Se acabaron igualmente los guisos con alegría. El subsidio de desempleo también se le habrá terminado ya. ¿Y qué es lo que hace un hombre amante de su familia? Pues buscarle un curro a su señora, a su ex, a su rosa de cotobro. Así es que el día de los inocentes llamó a su secretaria y le dijo: anda, prepárame un escrito guapo para contratar a mi novia. La cele lo miró de reojo y él tuvo que insistir: que no, cele, que no es una inocentada. Y él firmó, más contento que unas pascuas, con espíritu navideño, una resolución de alcaldía. Con esa firma y una calculadora, le salían alrededor de cien mil euros, sin contar lo del niño. Y sin meter dietas, invitaciones y agradecimientos varios, que eso también suma un pico.
Así que ahora la tiene colocada como jefa de turismo. Eso es un curro bueno: poco trabajo, mucho sueldo, horario flexible, viajecitos y dietas para alternar. Mucho mejor que fichar por el mirlo o por el playacálida, desde luego. Entre otras cosas, porque en este curro que le ha buscado su novio no hay convenio provincial ni comarcal, sino que el sueldo y la jornada y esas cosas se arreglan en familia. Y si yanguas le dice a su señora que hay que sacrificarse y trabajar un domingo yendo a Marruecos a estrechar relaciones con el magreb, pues se va.
Total, yanguas ya está acostumbrado a sacrificios de estos. Lleva más de veinte años sacrificándose por su pueblo. Bueno, por su pueblo, no, por almuñécar. Podía estar de médico ganando dos mil euros y echando guardias como un tonto, pero él ha decidido sacrificarse y aquí está, cobrando seis mil euros al mes más o menos y echando horas extras para resolver, al menos en lo más cercano, el problema del desempleo.
Así se defiende la familia, con hechos, y no con demagogia. Los obispos, pues sí, defienden a la familia de boquilla, pero ellos no se casan, no tienen que preocuparse de la mujer, de los niños. Así es muy fácil defender la familia.
Yanguas la defiende de verdad, en el tajo. Llega un concejal y le dice: mira, me haría falta un curro con sueldo bueno para mi adela. Y yanguas le dice: hombre, jesusito, para ti, gloria bendita, lo que quieras. Y yanguas contrata a la señora del concejal. Luego llega eva y le dice: anda, juancar, un trabajito para mi marcos. A tu hermano le busco yo un curro de escándalo, le dice yanguas. Si aquí trabaja el niño de la loli, por qué no va a trabajar tu hermano, amiga eva. Contratado. No se hable más. Son treinta y siete mil euros. En fin, no se va a poner rico, pero estará mejor que cogiendo basura a las tres de la mañana.
Y no se piensen mal: que él, que ellos, que este personal no viene a vivir de la política, que ellos sólo quieren tener un buen trabajo y un estupendo sueldo del ayuntamiento. De la política, no, que eso es caca, del ayuntamiento. Se sacrifican por nosotros y justo es que tengan una recompensa. Además, que todos esos sueldos se están adjudicando con el permiso del pepé y el pesoe, que son así de respetuosos con las familias convergentes, con las familias socialistas y con las familias populares. Con las otras familias, ya es otra cosa.
En fin, como dice mi vecina, una que nunca se entera de ná cuando hay reunión de la comunidad, mientras no lo pague yo. Eso dice, mientras no lo pague yo. El administrador la mira, sonríe y se calla porque es muy prudente.
Mi mujer se pone de mala leche cuando la oye, pero es que mi mujer tiene un genio. Salud.
10 de enero de 2008
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