Dilatado

Dilatado en exceso resultó el pleno del martes. Tanto se alargó la reunión que se tuvo que suspender la emisión de una peli que me han recomendado, y que yo recomiendo fiándome del buen criterio de mis recomendadores.

La dilatación del pleno hizo que me quedara sin ver el rusia polonia. Pues vaya rollo con la política. Y el caso es que aquello lo podíamos haber resuelto en veinte minutos. Podíamos haber hecho como la eva gaitán, que cuando la alcaldesa le pidió que explicara el contenido de una enmienda con sesenta y tres hojas, le dijo con mucha seriedad que no hacía falta porque todos sabíamos leer. Insistió la señora thl: así se entera el público de lo que ustedes piden. Y yo no sé si fue por chulería, por flojera o porque no sabía explicar muy bien qué coño ponía en aquellos 63 folios, la señora portavoz dijo aquello que sonó tan bonito: El público no vota. Quienes tienen que votar son los concejales. Y se quedó tan contenta.

Parece ser que alguien le ha reprochado el gesto y el comentario, pero esta señora dijo la verdad. Cuenta con mi apoyo, eva, para lo que haga falta. Menos para ir a la mancomunidad, que eso me lo ha prohibido fermínté.

Ayer debatíamos de nuevo qué ilustres personas nos van a representar en eso que se llama el ente mancomunado. Con ese nombre ya te puedes imaginar: el ente mancomunado. Suena regular nada más.

Bueno, pues usted sabrá que en este tema hay una historia emocionante que yo le resumo en varios capítulos.

Uno: pacoprados se reúne con un servidor y unos cuantos más y nos ponemos de acuerdo en que los representantes van a ser un pepero, un andalucista, un socialista y un rojo.

Dos: Un día y otro día, y otro más, pacoprados le pide por favor a thl que no lleve ese punto todavía al pleno porque no está preparado psicológicamente para votar, porque ese día no es bueno según el horóscopo o porque no le parecía de buen gusto votar ese tema el mismo día que elegíamos el representante del ayuntamiento en resur. Igual no eran esos los motivos, ya no me acuerdo bien, pero el caso es que aquello lo fuimos dejando y dejando…

Tres: Hasta que un buen día saca mi amigo paco un escrito con dos anagramas en la cabecera, nos lo reparte en mitad del pleno y me dice: anda, morgan, léete esto, es urgente: Y entonces me entero de que las cosas han cambiado. Los representantes sexitanos en el ente serán dos socialistas y dos convenientes. Me dio una risa que ni te cuento.

Cuatro: Reaccionando con rapidez, mi amigo fermínté lanza un órdago a pacoprados y le dice allí delante de todo el mundo: paco, te ofrecemos el darte los cuatro para ti. Y paco, que es un caballero, declina el ofrecimiento: quizá le parecía un abuso tener tantos representantes. O quizá es que manolo contreras le dijo que él no iba ni muerto. Otra posibilidad es que le dio miedo aceptar porque se enfadaba yanguas y ya no había pacto para el ente. Va a ser eso.

Cinco: Los peperos le dicen al juez que eso es ilegal y que no se puede elegir a los representantes en el ente de forma caprichosa sino de acuerdo al resultado de las elecciones municipales.

Seis: el juez le da la razón a los peperos.

Siete: Resumiendo mucho, ayer en el pleno se trataba de elegir de nuevo a los representantes obedeciendo al juez.

Los rojos nos fuimos a un sofá que hay detrás de las cortinillas porque nos parecía una chorrada eso de votar si se cumplía la sentencia de un juez. Y también nos parecía una cosa rara elegir qué representantes pondrían los peperos, los socialistas y los convenientes. Rara, rara. Mientras fermínté y un servidor hablábamos de nuestras cosas, los corporativos procedían a debatir el qué se votaba, el cómo y el cuándo. Un tostón. Ya se lo digo yo que estaba allí.

Al final era para reírse: los socialistas y los convenientes se habían puesto de acuerdo para elegir a mari carmen reinoso como representante del pepé. De esta manera, la reinoso sacó más votos que juanjo. No digan ustedes que no tiene gracia el tema. Sobre todo si esa votación se hace después de que todos los peperos, salvo juanjo, dijeran que ellos renunciaban a ser candidatos.

En el otro bando, los peperos y los andalusíes se habían puesto de acuerdo para elegir como representantes de conveniencia a dos concejales que aún no han saltado a la fama. Eso era una jugarreta pero tenía sentido ya que estos dos convenientes no habían renunciado a ser candidatos.

Hoy te meas de risa cuando lees en un diario local que, tras la consulta hecha a un prestigioso jurista, el pepé se ha quedado sin representante. Tengo la duda de si esas dos palabras seguidas tienen fundamento. Bien pudiera ser que la fuente consultada no fuese jurista. También podría ocurrir que no fuese prestigioso. Y, finalmente, podrían darse las dos circunstancias: que no fuese ni jurista ni prestigioso. Mira que si el que se ha inventado esa ocurrencia es médico. O asesor en paro de la mancomunidad.

Mi señora, que no es prestigiosa, aún, ni jurista, todavía, dice que lo único claro en esa votación es que hubo once papeletas nulas, todas aquellas que llevaban el nombre de la reinoso cuando ella ya había dicho que no era candidata. Es como cuando vaciamos las urnas y aparece una papeleta para bart simpson. Y que me perdone la reinoso la comparación.

El tema sigue liadillo. Yo no descarto nada porque esta gente es ocurrente. Fíjense que en el pleno, cuando los miembros de la coalición socialismo conveniente pidieron voto secreto, los peperos andalusíes reaccionaron diciendo que ellos romperían el secreto proclamando a voces su voto para que todo el mundo supiera así, por deducción, el voto de los discretos. Y entonces, el señor médico tuvo una ocurrencia que me hizo descojonarme: muy serio el hombre, va y le pregunta al secretario: perdone usted, buen hombre, una consultilla más: ¿se puede enseñar el voto en una votación secreta? Y antes de que el paciente secretario le respondiese lo que ya sabíamos todos, lo que ya sabía por supuesto el médico, antes de que le dijera: pues claro que sí, amigo, tú vota en secreto y deja el mundo correr, que si estos son chismosos, su voto no van a esconder.

Sólo puedo sacar una conclusión de esta anécdota. O la memoria le falla a unos niveles ya preocupantes, o su cinismo crece con los años. Todo el mundo, menos él, recordaba aquella memorable sesión de hace cuatro años, ya casi cinco, en que los peperos le quitaron la presidencia del ente a los socialistas gracias a la traición de un andalusí motrileño digno de militar en el partido de yanguas más que en el de luisaragón. En aquel momento, en mitad de una votación secreta, lo más bonito era ver a yanguas diciendo a voces: a ver, enseñad el voto, que se vea, cuando en realidad quería decir: enseñadme el voto, que yo quiero verlo, que no me fío de nadie, que yo sé de lo que hablo, porque en esto de las jugadas sucias, nadie de los que aquí hay puede alegar más trienios que yo.   

Pues eso, un pleno dilatado, pero no tanto como el miembro viril de ese granadino que ha tenido que llamar a los bomberos para que le quitaran con una radial de la señorita pepis un cilindro metálico que se había puesto en el pito para jugar a cosas guarras. Aquí, muchas afotos del ratón con la chamorro, la trini, el juanjo y un camioncito que nos ha regalado la diputación. Muchas fotos y mucho rollo, pero ya me gustaría a mí ver a cualquiera de los bomberos sexitanos resolviendo un problema de esa en verga dura.

Salud