La rubia arantxa

En el pueblo se habla estos días de una rubia que parece estar encargada del mantenimiento de la legalidad en el ayuntamiento. Igual que ha dicho que los despidos son legales porque sus contratos no eran para toda la vida, como el amor, se le ha olvidado decir que el resto de la plantilla está en la misma situación. Igual mañana nos dicen, el señor alcalde y la rubia, que hay que despedir a todos. Vaya usted a saber.

La chica rubia que vela por la legalidad también olvidó decirle a yanguas que ese pleno estaba convocado por la oposición y que él no era nadie para impedirlo. Pero es habitual en la chica rubia olvidar esos pequeños detalles. No es el primero ni el último. También olvidó decir a yanguas que era ilegal no pasar a votación la propuesta sobre tasa de basura que llevaron a pleno algunos grupos. Esta chica olvida. Pero eso no se le puede recriminar. Al fin y al cabo, cada uno es como es. Nadie es perfecto.

Les voy a contar un secreto. En secretaría hay un libro en el que se apuntan las resoluciones de alcaldía. Es como un pequeño índice de maldades. ¿Me creerán ustedes si les digo que en ese libro hay bastantes cosas tapadas con tipp-ex y reescritas? ¿Será eso legal o quizá habría que pensar que no lo es?

La rubia está enfadada porque dice que la encarna le ha dado cuatro voces. La reacción lógica y espontánea de la masa obrera del ayun ha sido llamar a mariadolores y pedirle que les hiciera unas fotos. Para eso es la jefa de protocolo. Y, como si de una exclusiva se tratase, han sacado las fotos en la revista de la jefa de protocolo. Supongo que la rubia no habrá cobrado por esa exclusiva, pero igual es porque se le ha olvidado.

Yo también voy a ver si me hago alguna foto y salgo guapetón. Pero estos currantes no sé yo si han hecho bien en abandonar el puesto de trabajo para ir de reportaje fotográfico. Supongo que la iniciativa habrá sido del agrado de mi amado yanguas porque si no, eso de las fotos y la gente esperando para que le miren lo de la licencia, no habría acabado bien.

Creo que también están preocupados porque han despedido a siete compañeros, pero lo que no vamos a estar es todo el día haciéndonos fotos por una cosa o por otra. Había que elegir entre dos problemas y ellos han elegido lo correcto. ¿Qué importancia tienen siete despedidos si lo comparas con ese vocerío que la encarna le lió a la rubia? No hay color.

Es más, por mucho que digan unos y otros, el despido de esos siete era más que lógico, y así lo habrá entendido la buena gente como arantxa y yanguas.

Hay una joven que se llama julieta y lleva ya trabajando más de veinte años en el consistorio. Dicen que tiene cinco niños. Joder, pues el tema está claro. Esa mujer necesita descansar, que veinte años en el ayún ya son para cansar a cualquiera. Y ahora podrá dedicarse a sus hijos, que seguramente los tenía abandonados. Además, su novio es el portero de una discoteca y puede colarla siempre que quiera para echar un rato de marcha. ¿Dónde está el problema?

Han despedido también a mi amigo el notificador. Digo mi amigo porque es amigo de todo el mundo. Cuando me ve por la calle me dice: ¿cómo estás, patapollo? Yo le digo algo que no se puede escribir. Y los dos sonreímos. Yo me creía que era amigo hasta de yanguas pero se ve que no. O que sí, porque veamos el tema sin apasionamiento. Más de veinte años andando de la ceca a la meca. Esos pies tienen que estar hechos polvo. Ya se merece un descanso ese hombre. Pero hay una cosa que me intriga: ¿quién notificó el despido al notificador?

En el paro ha quedado joaquín, el amigo de los leones. Ahí sí que no puede haber dudas. Después del homenaje que yanguas le hizo a este domador, qué mejor recompensa que mandarlo a su casa para que cobre el paro y disfrute de la vida. Sólo un insensato, una mala persona habría permitido que ese hombre siguiera trabajando expuesto a que el león se vengara.

Del resto no tengo muchos datos pero conociendo a yanguas supongo que en todos ellos habrá una buena motivación. No me creo yo, como dicen algunos, que yanguas haya ordenado esos despidos por rencor, por maldad o porque le salía del alma.

Amigo, si conoces a alguien que trabaje en el ayún, y prefiere hacerse fotos con la rubia antes que ir a la plaza a una concentración de apoyo a sus compañeros despedidos, dile esto de mi parte: arrieros semos. Ah, dile también que con la vergüenza no se come, pero que ayuda a dormir.
Salud