La concejala que huyó del partido del doctor está a punto de llegar al cielo tras su paso por el limbo. Hay quien opina que no eligió bien su destino ya que los caminos buenos no van del cargo al cargo.
La concejala juega y marcha de oca a oca. Su antiguo jefe y
compañero, el doctor, respondía con escasa elocuencia a un camarada que le
interpelaba: en la oposición hace mucho frío. Fue su lacónica respuesta.
Ahora que llega el crujir de dientes, en las asambleas de
angustias vieja el buen humor se recuerda como algo lejano. Pedidle el acta
cada vez que os la encontréis por la calle, dicen que se dijo. Avergonzadla
siempre que podáis, dicen que se dijo. Vienen a verme al rastrillo, ellos, y me
lo cuentan, como un susurro, como una expiación, como queriendo huir de la
responsabilidad compartida. Yo no estoy de acuerdo, me dicen. Y tampoco estoy
de acuerdo con la prófuga, me dicen. Se llama tránsfuga, le dice el amigo. Se
llama eva, matiza el otro. Ya, pero es tránsfuga. Y prófuga, remacha el otro.
Prófuga porque huye.
Huyen de la quema. Todos. Porque el hielo, el frío helado al
que alude el doctor, también quema. Y ahora queda por ver el orden. En este
caso no se ha cumplido lo de primero el capitán. Saltó antes por la borda la
segunda de a bordo. Y en el borde se agolpan varios. Se disputan el salvavidas
que parece no aparecer.
Buscan refugio. Y almuñécar es tierra de asilo. Ya lo dijo
su alcaldesa. Tal vez no estaba pensando en ese entrenador de fútbol que ha
llegado a getafe sin que el setenta y siete haya tenido tiempo de meter baza.
Tal vez, nuestra alcaldesa, ya sin verruga, pensaba en otros refugiados. Ya ha
dado asilo a una. Vendrán más.
Y en el equipo de gobierno las relaciones se vuelven
complicadas. Ay, las interventoras, señor. Cuanto sufrimiento. Interventoras y
refugiadas. Y ya mismo refugiados. Al menos uno. Qué complicada es la vida. Que
se lo digan a alberto garzón.
En vez de todocultura, el futuro puede ser todorefugio. El
pesebre sigue abierto y la gente tiene hambre. Todo amenaza cambio. Puestos a
imaginar, podemos especular con que la próxima temporada, en lugar del teatro
clásico o el festival de cortos, se vuelva a comentar en este pueblo el
certamen de escultores sirios.
Salud