La vida política es dura, aburrida y cansada según qué días.
Pero otros, sin embargo, la política es divertida y arranca una sonrisa a
cualquiera que se atreva a mirar con desenfado.
Esta mañana estábamos de testigos en una reunión llamada
pleno para presenciar el sorteo de las mesas electorales. Nos ha dicho el
secretario que a veces ocurre que es imposible notificar la elección al
presidente de alguna mesa por múltiples motivos y que había dos opciones: una
era volver a celebrar otro pleno para hacer sorteo público en las mesas en que
eso haya sucedido; la otra era tirar de lista a partir del inicialmente
elegido. Mi respuesta ha sido que lo hicieran como más fácil pareciera a los
técnicos. El amigo juandedios, de siempre encargado de estas tareas en el
ayuntamiento, ha dicho que era más fácil tirar de lista. Y entonces, un grupo
de la muy noble y leal oposición, defensor de la transparencia, parece ser, ha
dicho que no estaba muy claro el tema. He preguntado que cómo se hacía antes, y
antes de antes, y antes de antes de antes, y el amigo juandedios ha respondido
que así, tirando de lista se ha hecho siempre. Pues eso, que hemos acordado
hacer lo de siempre, sólo que antes no había tanta discusión porque no se
preguntaba al pleno. Es un detalle simpático.
Pero tengo un detalle más simpático aún. Hace cuatro días
tuvimos reunión de las comisiones para preparar el pleno. Una concejala
portavoz de la muy noble y leal oposición a todo mostró su preocupación porque
la concejala garciolo no podría asistir al pleno al tener una cita médica de
importancia. La alcaldesa dijo que no le importaba cambiar el pleno al martes
para que la señora garciolo pudiera asistir. Y así se hizo. Mi amigo fermínté
me miró y cruzó conmigo una amplia sonrisa mientras me decía: '¿te imaginas al
que había antes cambiando un pleno de día porque el morgan tiene que ir al
médico? Nos descojonábamos de risa.
Está bien que esta alcaldesa sea tan condescendiente con los
que critican sus verrugas de bruja malvada, está bien que este secretario haga
estas preguntas al respetable; está todo muy bien porque nos permite apreciar
las importantes diferencias que algunos se resisten a ver. Y además, y esto es
relevante, nos saca una sonrisa, algo que siempre merece la pena.
Salud